A las personas les encanta meterse en la vida de los demás, creo que el día que esto no suceda muchos momentos incómodos e infelices se evitarán.
Odio a los que se meten conmigo y mi cuerpo, o sea yo, por lo menos, no ando por la vida, mirando cuántas canas le salieron a mi vecino, si está más viejo o más joven un amigo o cuán gorda está la gente.
De acuerdo a como me vista mi panza se nota más o menos, lo que para mí sinceramente no es un problema, sólo que la misma es un punto de atracción para los curiosos, chusmas y metidos de siempre que tienen que estar averiguando si la panza es de embarazo o de simple obesidad.
Con el tono sutil y de “yo no me quiero meter, pero me meto” te dicen con total desenfado “¿estás embarazada?”, a lo que sin pelos en la lengua, ni ningún tipo de sutileza les contesto claramente “soy gorda”. La gente por lo tanto intenta hacerse la que no dijo nada y buscan cambiar de tema como si uno quisiera hablar con ellos.
La verdad es que me tienen cansadas las personas que siempre tienen algo para decirte, no sólo pasa por el tema del cuerpo, sino que es gente metida, a quienes uno no les abre la puerta de sus vidas, pero que siempre están tratando de buscar algo para ver qué es lo que pueden averiguar de uno.
Hoy fue el tema del embarazo, obvio mi panza es gorda y puede dar a otra interpretación, sin embargo no entiendo la razón de que se inmiscuyan en tu vida cuando las señales desde lo no verbal y verbal dicen claramente “No Molestar”.
Laura A. Pereyra - Yo la Más Gorda de Todas
Nota publicada el 27 de Marzo de 2010
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Aclaración de la autora: Los textos que aquí se encuentran son parte del pensamiento de una época de mi vida. Como todas las personas evolucionamos y no todo lo escrito en su momento es parte de mi pensar en la actualidad, sin embargo este blog muestra el crecimiento de mi persona y mi pensar respecto a la temática eje del blog.